La familia del afamado realizador ha anunciado su fallecimiento en su hogar en Inglaterra debido al cáncer que padecía.
Quien no esté inmerso en el mundo del cine, quizá no comprenda bien cuán importante es un productor. La forma de entenderlo es sencilla: Sin él, tu película no existe. No importa que tan bueno seas dirigiendo, o qué tan interesante sea tu historia, si no conseguís un productor que te ayude -mejor dicho, financie-, nunca verá la luz.
Por estas razones, el nombre de Gary Kurtz pasará a la historia como el hombre que sí confió en George Lucas y su fantástica saga Star Wars. Tras cerrársele muchas puertas, acudió a Kurtz quien no dudó del potencial de la historia y lo acompañó a filmarla y desde 1977... el resto es historia.
Kurtz siguió en Lucasfilm en su aún más fascinante secuela El Imperio Contraataca, donde nuevamente fungio de productor, aunque las problemáticas sesiones de rodaje llevaron a cada uno por caminos separados. Sin embargo, su legado en las dos producciones más geniales de esta historia seguirán por siempre
Además, Gary ha tenido dos nominaciones a Mejor Película por sus producciones -recordemos que quien se lleva la estatuilla es el productor-, por su debut junto con George Lucas haciendo de director en American Graffiti en 1974 y por, obviamente, Star Wars en 1978. Logró llevarse un Globo de Oro por Graffiti en la sección comedia y por Star Wars el premio a Mejor Película por el círculo de críticos de Los Ángeles
Otras ficciones fantásticas que le trajeron grandes placeres fueron El Cirstal Oscuro de 1993 y una secuela no oficial de El Mago de Oz, titulada Volviendo a Oz. Por ambas, ganó el premio Saturn a Mejor Película de Fantasía.
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